
Emerges de la tierra, firme como si tuvieras raíces. Abres los ojos y las luces llueven.
Notas al margen hablan cuando no mueves los labios. Inentendible es a veces el rubor provocado por miradas. Atento el lápiz que escribe sin querer, deslizándose por parajes diversos, puntuando las ies que se escapan y dejan de lado las formalidades.
Frondosas paredes, mixtura de temperatura. Calor y frío, se mezclan formando la calidez que desaparece en el exterior.
Un instante es un soplo, desaparece cuando te das cuenta y te preguntas donde fue.
Un instante es un mundo eterno, irrealidad ficticia, pasión de pocos, orgullo innato. Tocar con mirada, integrar el aliento progresivo, sentir con dolor, vivir siendo el mismo, atado al presente, librando el futuro, dirigiendo señales fantásticas creadas en momentos perdidos.
Caminar acompañado, sentir la arena en los pies descalzos, manos juntas sintiendo las caricias de un dedo rebelde que no esta tranquilo. Húmedo el camino dejado por las olas que lejanas mareas traen para mojar las bases de un recorrido que al mirar atrás, vuelve a ser el mismo sin encontrar las huellas.
A paso tranquilo, respirando particulares aromas, es tu voz que acompaña, es tu esencia la que perdura. Eterno e inmenso, con corrientes dispersas, cambiante y único en cada momento. Será tu forma, será tu movimiento, es quizás la brisa que dejas o será tu significado el que deja huellas, el misterio de tus aguas, la razón de vivir para algunos, el temor irreversible que causas en otros.
Navego en tus aguas, conociendo bases de movimientos, un acorazado a mi lado las surca sin problemas, un botecito amigo intenta motivarse con tus olas, prefiero sentir el frío y el calor de tus masas, subir a la cresta de tus olas, bajar al fondo y descubrirte con mis ojos, revolcarme con la arena que traes, chocar con tus sentimientos, explorar tus rincones olvidados, descubrir tus tesoros.
Gracias por el momento, fue sin duda la ola mas perfecta que pude tomar, dibujando figuras exactas, perdiendo el equilibrio por momentos, subiendo y bajando complementados en un atardecer que reflejaba una sola imagen, composición inmediata, proporcional en sus medidas. Esfuerzo incesante en cada ola, fue la practica la excusa, fue la marea un impedimento, son las brisas el encuentro.
Alegría contenida, al volver a verte. Parado en la playa de un desierto, buscando al mar entre oasis. Buscando esa ola que no se divisa, la espera es sin duda tu angustia. Acostumbrado a un ritmo constante, es tu esencia de corrientes, es la marea y los astros los que mueven tus extremidades, son palabras al viento, que rebotan como pájaros en vidrios, que ven un camino despejado al estar ciegos en su naturaleza.
Sumergido en un fondo maravilloso, conociendo las pausas, casi nada es nuevo en un espacio que surqué por meses, aprendiendo en las rocas antes de saltar, a veces precipitando la salida, buscando donde hay un dejo de sabor, un loco lindo, un momento en la vida, dejando esencia, profunda ilusión, abrazos eternos conjugados en un solo propósito, ver el mar y no imaginarlo estando en el desierto. Mirarlo de lejos y ver que volvió a su curso junto con otras tablas que surcarán sus aguas.
Notas al margen hablan cuando no mueves los labios. Inentendible es a veces el rubor provocado por miradas. Atento el lápiz que escribe sin querer, deslizándose por parajes diversos, puntuando las ies que se escapan y dejan de lado las formalidades.
Frondosas paredes, mixtura de temperatura. Calor y frío, se mezclan formando la calidez que desaparece en el exterior.
Un instante es un soplo, desaparece cuando te das cuenta y te preguntas donde fue.
Un instante es un mundo eterno, irrealidad ficticia, pasión de pocos, orgullo innato. Tocar con mirada, integrar el aliento progresivo, sentir con dolor, vivir siendo el mismo, atado al presente, librando el futuro, dirigiendo señales fantásticas creadas en momentos perdidos.
Caminar acompañado, sentir la arena en los pies descalzos, manos juntas sintiendo las caricias de un dedo rebelde que no esta tranquilo. Húmedo el camino dejado por las olas que lejanas mareas traen para mojar las bases de un recorrido que al mirar atrás, vuelve a ser el mismo sin encontrar las huellas.
A paso tranquilo, respirando particulares aromas, es tu voz que acompaña, es tu esencia la que perdura. Eterno e inmenso, con corrientes dispersas, cambiante y único en cada momento. Será tu forma, será tu movimiento, es quizás la brisa que dejas o será tu significado el que deja huellas, el misterio de tus aguas, la razón de vivir para algunos, el temor irreversible que causas en otros.
Navego en tus aguas, conociendo bases de movimientos, un acorazado a mi lado las surca sin problemas, un botecito amigo intenta motivarse con tus olas, prefiero sentir el frío y el calor de tus masas, subir a la cresta de tus olas, bajar al fondo y descubrirte con mis ojos, revolcarme con la arena que traes, chocar con tus sentimientos, explorar tus rincones olvidados, descubrir tus tesoros.
Gracias por el momento, fue sin duda la ola mas perfecta que pude tomar, dibujando figuras exactas, perdiendo el equilibrio por momentos, subiendo y bajando complementados en un atardecer que reflejaba una sola imagen, composición inmediata, proporcional en sus medidas. Esfuerzo incesante en cada ola, fue la practica la excusa, fue la marea un impedimento, son las brisas el encuentro.
Alegría contenida, al volver a verte. Parado en la playa de un desierto, buscando al mar entre oasis. Buscando esa ola que no se divisa, la espera es sin duda tu angustia. Acostumbrado a un ritmo constante, es tu esencia de corrientes, es la marea y los astros los que mueven tus extremidades, son palabras al viento, que rebotan como pájaros en vidrios, que ven un camino despejado al estar ciegos en su naturaleza.
Sumergido en un fondo maravilloso, conociendo las pausas, casi nada es nuevo en un espacio que surqué por meses, aprendiendo en las rocas antes de saltar, a veces precipitando la salida, buscando donde hay un dejo de sabor, un loco lindo, un momento en la vida, dejando esencia, profunda ilusión, abrazos eternos conjugados en un solo propósito, ver el mar y no imaginarlo estando en el desierto. Mirarlo de lejos y ver que volvió a su curso junto con otras tablas que surcarán sus aguas.
2 comentarios:
queee, no cachaba que escribiay cuentos. Te tendré en futuras visitas.
Buena Tomacho. Obvio que si, voy a seguir subiendo mas adelante mas cuentos y pensamientos. Un saludo y espero comentarios.
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