lunes, 26 de mayo de 2008

Artista en vida


Artista de mil historias, un conocedor y amante de la vida. Un reflejo fiel de la carga personal que trasmite tu presencia, dejando huellas en el alma de cada persona que se topa contigo.
Pasas desde la pintura a la escritura con una naturaleza que asombra, aquella que solo tienen los iluminados por un don especial que quisiésemos algunos. La abstracción simple, la dureza en comentarios precisos, la ingenuidad que da tu alma sin tener un dejo de maldad. El despego a lo material, a los recuerdos de obras en si mismas, a cambio de una compañía que suple y complementa tu esencia de persona.
Traspasas vida en tus palabras, en conversaciones que cada día cuesta mas tener. Un sin fin de momentos están grabados en la memoria, donde puedes movilizarte en tu independencia vital.
Creador y líder en lo que haces y dices, posees un imán para caer bien a todos que asombra. Es algo que no tiene explicación lógica, porque la energía que llevas contigo es más fuerte que una palabra bonita en un tiempo perfecto, sino que es el poder que trasmites siendo tú mismo en cada minuto y a cada instante.
Ejemplo en vida de un esfuerzo constante, que llevado en palabras no esclarece en nada la oscura rutina de una realidad necesaria. Un apego a la vida, un llamado que consuela, una dureza que resquebraja al más fuerte de los muros.
Un futuro no es palabra, el presente es cada vez más lejano, un pasado que rememora tibios reflejos de libertad en conversaciones que devuelven la esperanza.
Lograste ser y sigues siendo, aquel que llena los espacios vacíos, donde descansar cuando no hay fuerzas y donde preguntar cuando no hay respuestas. Eres aquel ser maravilloso que logró formar un núcleo inseparable junto a tu soporte y sostén fundamental. Es el legado que tenemos presente en nuestros genes, que nos hace ser distintos y únicos. Es el tesoro que pudimos ver y que nos entregaron en plenitud. Un regalo que permite ser afortunado en una tierra donde la riqueza se mide con onzas y donde la esencia tiene cara de metal. Fue ahí mismo donde tu vida logró trasformar aquello en cariño y lealtad total. Demostrando a cada día que la vida y las ganas las ponemos nosotros, independiente de quien nos ponga la cruz que debemos cargar.

domingo, 18 de mayo de 2008

Paul Potts, sueños de vida


Estas ahí, erguido ante tal multitud, que expectante espera el comienzo de la pieza। Aquella que deje fluir lo más intimo para regalarlo en plenitud. Parado frente a frente con los miedos, hipnotizando con la mirada, provocando un quiebre en el hielo que nos cubra por completo.
Armónica fusión de notas, el canto elevado a su máxima expresión. Detrás de ti una historia de vida, que dejaste atrás estableciendo un paréntesis exacto.
No era solo estar ahí. En aquel momento de presiones, donde la voz se quiebra. Era expresar en vida que un aplauso es el reflejo puro en un sin fin de tropiezos. Es buscar la realización en lo que te llena por completo, dejando de lado las apariencias para vivir de un sueño que pudiste palpar.
Es volver a nacer para los otros, pero para ti es mirarte como siempre. Ahora desde una vitrina que da gloria, donde antes eras un número guardado en la memoria.
Vendedor de ilusiones, sueños dormidos. Historia que conmueve, don innato que no deja lugar al espacio. Complemento perfecto en una sala que clama, la necesidad real de volver a sentir. En un mundo donde la materialidad ha dejado de lado a los talentos, reemplazándolos por un pedazo de materia inerte que es un fruto vacío sin sabor.
Es tu historia, reflejada en unos minutos; la que remueve y sacude el polvo de muchas personas que estaban dormidas; las que despertarán del letargo de un mundo cada vez más lejano y frío.

viernes, 16 de mayo de 2008

Danza en el monte


Monte divino, que das vida en tu esencia. Lugar prohibido para muchos religiosos, personal para otros, un espacio que acoge a lo más puro o que recoge la escoria por un pan de alimento. Respeto infundes en muchos, paraíso en vida te han llamado. Pliegues finos como la tela de un vestido de perfectas caídas, surcan en tus mares los avezados corsarios, que logran encender la llama interna que posees.
Mirarte es apreciar la maravilla de la creación, un trabajo incomprensible, una sola sonrisa vertical. Una piel sensible a tu lado, calidez exudas por los poros. Perfecta ilusión de un poema tendencioso, exaltación de un joven imberbe de querer conocerte y tocarte. La calma del veterano es compañía perfecta en tus arrugas y ropajes, junto a las canas que yacen postradas esperando su caída.
Un sin fin de palabras te pueden describir, apodos obscenos hablan de ti sin conocerte en la intimidad. Eres complemento del alma cuando te conectas con el corazón, esperando satisfacer al extraño que se nutre de ti. Una danza de ritmos intensos, valles y tiempos de espera, van dando curso a una sinfonía que puede acabar en cualquier momento. El precipicio esta cerca y los latidos aumentan, la presión sube y estar al límite donde cada uno se pierde deja un sabor que debiese durar para siempre.
Palabras en movimiento, hablando con el cuerpo, masas cambiantes de formas, choques apasionados bajo la luz de la luna, un escalofrío hace notar que es real, un estruendo que corre con fuerza desde adentro te hace perder la conciencia por momentos, donde el calor pasa a ser tal que quema sin dolor. Es un instante antes de volver a la realidad, una sonrisa personificada, finalmente un suspiro relajante que se escapa sin rodeos y que se pierde en un sueño acompañado de tu sabes quien.

miércoles, 14 de mayo de 2008

Antes del despegue


Fueron y serán momentos
aquellos donde no existe un limite que nos guíe
donde la incertidumbre es constante y sonante.
Si bien está esa complicidad de antaño
falta ese empujón para que prenda el motor
midiendo los pasos
o probando si ya no existe esa magia
donde poder despegar hacia un futuro desconocido
con todos los miedos arriba
y con todas las ganas a cuestas.
El tiempo es breve
y la espera eterna
donde la calma ha sido una virtud
entre tormentas y vientos fuertes

Subo al avión y ya en vuelo
me piden que no salte
que mida las consecuencias de volver a volar
en aquel avión que pensé nunca mas volver a ver.
A pesar que conozco sus movimientos y fallas
aún siento su debilidad y la mía
existe todavía una conexión que me inspira
y me permite volver a soñar
que vuelo por los aires como antaño, sintiendo la
libertad del águila y el resplandor del sol a mis espaldas.

Pero como todo, hay un límite
ese que nos imponemos los amantes de la libertad
nos preparamos para que el avión no tenga fallas en su despegue
y que volvamos sanos y salvos a tierra
donde volvemos a pensar en el próximo vuelo y a respirar el aire
fresco que solo dan los kilómetros de altura.